El proyecto de reforma para este piso de 70 metros cuadrados, concebido para una pareja con su niña, se centra en maximizar el espacio de almacenaje y crear un ambiente acogedor con un estilo nórdico contemporáneo. Con tres habitaciones, una cocina con zona de lavandería, un salón y un baño, se ha tenido en cuenta cada detalle para optimizar la funcionalidad y la estética.
Una de las prioridades era proporcionar suficiente espacio de almacenamiento para la pareja y su hija,.. Para abordar esta necesidad, se ha incorporado un espacio de trastero adicional en el diseño, permitiendo guardar objetos que no se utilizan a diario sin sacrificar el espacio vital.
El mobiliario ha sido diseñado para complementar el estilo nórdico deseado, utilizando colores blancos para crear una sensación de luminosidad y amplitud, madera clara para agregar calidez y detalles en negro para un toque de contraste y elegancia. Esta paleta de colores se extiende por todo el espacio, desde los muebles hasta los accesorios, creando una cohesión visual que ayuda a unificar el diseño.
En la cocina, se ha integrado la zona de lavandería de manera inteligente para optimizar el uso del espacio. Los muebles han sido diseñados para ofrecer un almacenamiento eficiente, con armarios altos y bajos que maximizan la capacidad sin comprometer el estilo.
En el salón, se ha creado un ambiente acogedor con muebles confortables y funcionales, además de estanterías pensadas para gran cantidad de libros.. Estas estanterías no solo cumplen una función práctica, sino que también añaden carácter y personalidad al espacio.